Todas las entradas de: Nancy Edith Romero

Fotografía punto 3De Matilde Robustelli

Primera experiencia: Una sociedad de fomento en el conurbano sur…participante de un proyecto de cultura digital en los barrios. Concurren en especial amas de casa que desean tener contacto con estos saberes tan naturalizados entre sus hijos y nietos…Un docente guía los aprendizajes eminentemente prácticos…Cada asistente trabaja individualmente después de haber tenido las clases teóricas pertinentes. El interés principal de búsqueda de páginas y links lo constituye la cocina, aunque también temas de salud, tejidos, etc. Muchas polemizan sobre ciertas opiniones surgidas en las páginas, dado que tienen larga experiencia en lo que están investigando. Buscan lo desconocido para sorprender a su entorno fliar. Investigan ingredientes accesibles a su presupuesto y debaten acerca de la factibilidad de conseguir otros. Deciden compartir sus búsquedas y organizar una feria barrial para recaudar fondos para ayudar a la Sociedad de Fomento a comprar una nueva computadora. Se concretan para este evento variados platos producidos a partir de la búsqueda por Internet…Junto a las fuentes aparecen impresas las respectivas recetas y volantes informativos acerca de dónde conseguir los ingredientes y la mejor y más barata opción para adquirirlos.(Aquí podemos percibir distintos saberes puestos en juego en la cultura digital, relacionados con un determinado interés como una mejor alimentación y ahorro de recursos).

Segunda experiencia: Relacionada con la búsqueda de recursos para la redacción de cuentos fantásticos en una escuela secundaria. (Está en sintonía con el eje Los niveles del sistema educativo y la cultura digital).La docente asesora acerca de posibles páginas para la realización de la tarea. Los alumnos están interesados porque con este trabajo práctico lograrían “levantar sus notas” y además participarían de una jornada literaria intercursos…Comienza el recorrido a la pesca de páginas y lecturas posibles…Les preocupan los personajes y las transformaciones: muchos arman un catálogo de personajes posibles, para luego delinear tramas; cortan y pegan; rearman, incluyen ilustraciones y sucesos inesperados que van descubriendo en el ámbito digital. Una vez logrado el material necesario comienza la construcción de los relatos, cada uno en su netbook, escriben, borran,  reescriben y esta secuencia se repite varias veces. Después de dos intensas clases supervisadas por el docente, van apareciendo las narraciones…luego vino la etapa de la edición prolija para ser presentada en el concurso. La mayoría agregó ilustraciones que pusieron una nota de color y de nuevas interpretaciones de los escritos. Una vez impresos fueron motivo de intercambio en clase para una nueva consideración y puesta en valor. Después siguió la corrección del profesor y el armado del programa de la jornada literaria. Para publicitarla se confeccionaron volantes que se colocaron en todas las clases  del colegio.

De Matilde Robustelli

 A pesar de la fuerza de esta cultura en la sociedad actual, muchos docentes al decir de A.M.Chartier se muestran nostálgicos del pasado y se quejan de la pérdida de vigencia del libro entre los jóvenes de hoy. Para éstos es “cultura muerta”, pues como aporta Urresti cada uno hoy programa sus contenidos vía computadora, internet, teléfonos móviles,etc.”Se mira el mundo por una pantalla”…a través de la que propone internet, movilizando así profundos cambios en la industria cultural. Esta metáfora de los nuevos modos de estudiar, divertirse, comunicarse, suele inquietar a los docentes que creen perder espacios frente a sus alumnos y se sienten descolocados ante “este peligro” que amenaza con competir con sus clases con cierta ventaja. Esta situación requiere que los docentes reflexionen acerca de repensar sus prácticas a la luz de la circulación de las nuevas tecnologías y pensar cómo procesar las distancias generacionales y las desigualdades sociales…” Lejos de pensar el vínculo de la cultura escolar con la cultura mediática y con Internet en términos de divorcio, resulta importante que la escuela y los docentes puedan traducir los cambios de la sociedad contemporánea en el curriculum, incluyendo una lectura crítica de los medios audiovisuales y electrónicos”( Massone). En este nuevo modo de mirar el mundo a través de las pantallas, también cambiaron las relaciones de poder y autoridad entre el mundo adulto y las jóvenes generaciones. Si bien Internet ha multiplicado la disponibilidad de información en variadas formas de comunicación: textos, imágenes fijas y en movimiento y sonidos, accesibles a gran velocidad, “información no es lo mismo que conocimiento”. Las estrategias para transformar la información en conocimiento a ensenar, se convierten en una tarea de la escuela, mediada por la autoridad cultural de los docentes. (Brito y otros).

La situación actual nos incita a desandar nuestro propio recorrido de formación docente y emprender un camino hacia la propia alfabetización en imágenes, para que la escuela incluya la posibilidad de formar también, internautas e incorporar nuevos formatos culturales para reposicionarse como trasmisora de cultura. “Se trata de un cambio radical del proyecto cultural de la escuela”. (Tiramonti).